como en la era fujimontesinista las bailarinas aún son un buen ingrediente a la hora de cocinar un sicosocial. pues si esto no fue un sicosocial ¿como se sostiene la vergonzosa actuación de un ministro de defensa prestandose a este farandulero circo al limite de forzar un careo con la bailarina en su despacho para las cámaras del magazzine dominical panorama?
y que hay de toda esa prensa que le siguió la corriente al sicosocial fingiendo indignación por las amenazas ministeriales de sanción penal contra la bailarina que se sentó en la bandera criolla ¿donde estaba la indignación de esta prensa arrastrada cuando antero flores araóz se refirió como llamas y vicuñas a los peruanos que pedían un referendum para el tlc?
hasta hoy flores araoz no se ha disculpado por su comentario racista.
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